Frente al horizonte blanco todo cazador está indefensx. 
¿Dónde empieza el camino imaginado?
Frente a la hoja en blanco todo poeta está indefensx.
¿Cómo seguir el rastro de las bestias invisibles? 
Frente al lienzo en blanco todo artista está indefensx.
¿Qué armas harán correr la tinta por el paisaje? 
¿Qué la puede hacer brotar?

Instintos de caza es un seminario que propone lazos posibles entre la pintura y la poesía para dominar el bloqueo creativo. 

Dos artistas fueron convocados a la búsqueda de un mismo trazo desde la distancia física y de disciplinas. Argentina y Venezuela. Artes plásticas y literarias. Juanjo y Oliver. Ojos claros y ojos oscuros. Creación y creación. Supervivencia y supervivencia. Instintos.

Este espacio es un llamado para creativos del texto y de la imagen: sin experiencia, profesionales o completamente ajenos a ambos universos. Juntes elaboraremos un kit de supervivencia con el que enfrentar a las fieras indomables y monstruos salvajes del arte. Un laboratorio de poesía ilustrada e ilustración poetizada para escribir imágenes y dibujar poemas.
En él, el camino que elijamos es el inicio y no hay decisiones equivocadas, haremos de cualquier recuerdo una munición que dispare todo el arsenal que llevamos a cuestas. Encontraremos puntos de partida dentro y fuera de nosotres para dar el primer golpe, escribir el primer verso, esbozar la primera línea.

A lo largo de cuatro encuentros exploraremos en nuestros cuadernos vacíos ejercicios de puntería a través de técnicas de escritura y técnicas de dibujo. Pero no siempre seremos sinceros con su utilidad y forma. Y es que quizás las armas de pintura nos sirvan para borrar palabras que no queremos leer, o el pincel nos ayude a deshuesar letras que no sabíamos escribir. 
Aquí no habrá sangre derramada, quizás sí un río que acabe con la sed que se siente cuando no se puede crear. No es importante la presa, sí lo es el gatillo y el impulso que nos trajo a todes a este desierto que pide a gritos un nuevo color.